Martes 04-05-04  0400 hs  Desde Kuala Lumpur

El sábado pasado dejamos finalmente Singapur. Después de un breve recorrido por la ciudad (o sea por el país...) llegamos al puente de casi un kilómetro y medio de largo 
que une la isla con la península de Malasia. Los controles en la aduana de ambos lados son rápidos y sólo debemos bajar del coche para hacer sellar el Carnet de Passage. Por cierto, la aduana de Singapur es lo más parecido a un aeropuerto moderno. En el control de pasaportes del lado de Malasia, debemos pagar un peaje en moneda local (ringgits). Al no haber ninguna casa de cambio en la frontera, ofrecemos hacerlo en dólares de Singapur, pero al final nos dejan pasar sin pagar nada.

Ya en Malasia, entramos a la ciudad fronteriza de Johor Bahru para cargar gasoil y buscar un cajero automático. Estamos otra vez en un país musulmán, la gran mayoría de las mujeres de origen malayo llevan la cabeza cubierta con una especie de pañuelo que les llega hasta los hombros y sólo permite verles las caras. Después de recorrer 210 kms, llegamos a la ciudad de Melaka. Desde el siglo XIV por aquí han pasado portugueses, chinos, británicos y holandeses, y ello se nota en la arquitectura de la ciudad. Templos budistas, taoístas e hindúes se mezclan con iglesias cristianas y mezquitas, convirtiendo a Melaka en una ciudad diferente por su historia y su bagaje cultural.

El domingo, después de recorrer 150 kms llegamos a Kuala Lumpur, en donde nos sorprende el carácter moderno del área conocida como el Triángulo de Oro. Pero hay algo que aún nos impresiona mucho más, me refiero a las Torres Petronas, espectaculares !!! Fueron terminadas en el año 1998 con un costo de casi dos mil millones de dólares, miden 452 metros de alto y quedamos impactados no sólo por su altura, sino también por la magnífica estructura arquitectónica, diseño e iluminación.


Jueves  06-05-04  0114 hs  Desde Kuala Lumpur 

Creo que por fin podremos cambiar la correa de distribución, la ventanilla y hacerle un chequeo general al Toyota. Llegamos a Kuala Lumpur el domingo y para nuestra sorpresa, lunes y martes fueron festivos al igual que el sábado primero de mayo. Según nos dicen, hay muy pocos días fetivos en Malasia y nos fueron a tocar todos juntos a nosotros... Mala experiencia tuvimos ayer con el servicio de Toyota. Aquí en Malasia hay muchos coches importados de segunda mano de Japón, razón por la cual Toyota no se ocupa del mantenimiento ni de las reparaciones de estos vehículos. Que tenemos que ver nosotros con esto ? Pues que consideran que nuestro coche también es de importación al no haberlo comprado en Malasia, increíble pero cierto !!!

De nada sirve discutir con la china que nos atiende, ella sólo cumple órdenes y tampoco acepta ponerme al teléfono con el dueño del concesionario, no vaya a ser cosa que la regañen por ello cuando ya antes había hablado ella y seguramente la orden del dueño había sido terminante. Un empleado de la misma Toyota nos sugiere ir a cualquier taller de reparaciones de coches, y después de hacer un llamado nos da una tarjeta con una dirección en la otra punta de la ciudad. Hacia allí nos dirigimos y según nos avisan hoy por teléfono, el lunes que viene tendremos nuestro Toyota reparado.

Conclusión: si no hay sorpresas a último momento, nuestra estancia en Kuala Lumpur será de nada menos que de diez días. Sumando las casi dos semanas que estuvimos en Tokyo visitando a nuestro hijo, los veinte días en Calcutta que demoramos para embarcar el coche y los diez días que pasamos en Singapur reponiéndonos de la India, como sigamos a este ritmo se nos vienen los monzones encima !!!

Kuala Lumpur es una ciudad bastante complicada para conducir. Las calles están todas señalizadas, en muy buen estado y la conducción es civilizada. El problema es que hay autopistas, puentes y túneles por toda la ciudad, pero al no estar familiarizados con los nombres y como tampoco se puede retomar en ningún sitio, podemos estar a sólo quinientos metros del lugar adonde nos dirigimos y terminar a cinco kilómetros de allí por no tomar el desvío correcto. Esto nos lleva a conocer el Kuala Lumpur profundo, adonde seguramente ningún turista llega...